(Poses para seguir caminando)
Se interviene un ambiente de 1971 del artista Hersúa,obra que ya fue concebida por él como necesariamentetransitada por un cuerpo, y en la cualéste y el ambiente escultórico se significan recíprocamente(hecho redimensionado por el empleo dedispositivos tecnológicos interactivos en unió n conlo orgánico en la actual puesta en escena, en la quepiel y prótesis se amalgaman, se hacen una sola; yeste hallazgo redefine el cuerpo: lo torna ‘cuerpovirtual’, lo elonga, lo amplía, detona una nueva fenomenologíaescénica). Y esta relación puesta envalor en la pieza entre cuerpo y espacio, una relación que es a la vez imitativa, deseante y dialéctica,en la que el cuerpo se nos muestra desarticulado,librado de la tiranía de identidad al mimetizarsecomo gesto simbólico y militante con el espacio,nos evoca el vínculo de otredad —ya sea con otroindividuo o con la colectividad— y nos permite leernosen el contorno de otro ser, en ese asombroso «vivir sintiéndose vivido», en la épica de la entrega.
Créditos
Dirección artística – Minerva Hernández*
Coreografía – Alicia Sánchez*
Escultor – Hersúa
Creador escénico – Rebeca Sánchez
Ingeniero biomédico – Óscar Yáñez
Ingeniero electrónico – Alicia Esponda – Faustino Álvarez Calixto
Programación – Eduardo Meléndez
Diseño de vestuario – Tamara Cruz
Paisaje sonoro – Ernesto Romero
Diseño de Montaje – Sebastián Solórzano
Asistentes – Carlos Mazahua Cruz
Documentación: Erick Palacios Guajardo
Montaje – Armando Domínguez Hernández – Octavio Ovidio
Hernández (Herchá) – Thomas Casey Hernández